lunes, 20 de octubre de 2014

Alimentación posparto


¿Te inquietan los kilos que ganaste durante el embarazo? Son tan normales como tu preocupación. ¡Lee los consejos de una nutricionista! 


Muchos obstetras recomiendan subir entre 9 y 11 kilos durante el embarazo. ¿Por qué? Si bien hay motivos de salud por los que conviene no ganar mucho peso durante este período, una de las respuestas más comunes es: “Para que te sientas mejor después de tener a tu bebé”, y sus miles de variantes. 
Si bien esto es cierto, aumentar de peso durante el embarazo es inevitable, necesario y está más que aceptado. Luego de parir, el tema no es cómo volver a nuestro peso, sino cómo alimentarnos para acompañar esta nueva etapa. Recuperar la figura que teníamos será, en muchos casos, una cuestión de tiempo y una consecuencia natural. Mariana Chao es nutricionista, y comparte algunos consejos que vale la pena recordar: 

* Es muy importante que no se genere ansiedad en cuanto a la pérdida de peso después del parto, ya que depende de cada organismo. Necesitamos enfocar toda la energía en el recién nacido. 

* La pérdida de peso es gradual; hay mujeres a las que les puede llevar 6 meses, y a otras, un año. 

* Si tenemos la posibilidad de amamantar a nuestro bebé,  nuestro cuerpo usará la grasa que reservó durante el embarazo para la producción de leche, y esto ayudará a estilizar la silueta.

* Durante la lactancia, las necesidades nutricionales tienen que ver con las demandas que genera la producción de leche.

* El desayuno es la comida más importante, ya que nos permite empezar el día con mucha energía para atender las necesidades del bebé. 

* Mantener una alimentación balanceada que incluya todos los grupos alimentarios: tener en cuenta siempre lácteos descremados, cereales integrales, frutas, verduras y, una vez al día, carnes. 

* La actividad física es clave. Conviene empezar de a poco, con caminatas de media hora, por ejemplo. Esto nos ayudará a sentirnos mejor, a tener más energía y también a bajar de peso. 

* Por sobre todo, estar tranquilas y aprovechar los momentos de descanso del bebé para dormir o para hacer lo que nos gusta y nos genera satisfacción.

En síntesis, no hay muchos secretos: Una alimentación balanceada y saludable será fundamental durante los primeros meses luego del parto, además de respetar de 4 a 6 comidas diarias –desayuno, colación a media mañana, almuerzo, merienda, colación a media tarde y cena–. 

¡Le agradecemos a Mariana Chao por participar en este post! 


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lunes, 6 de octubre de 2014

Cuando tu bebé empieza a comer

Los primeros alimentos sólidos son un hito en la vida de cada niño. Para algunas mujeres, además, ¡pueden significar todo un desafío!




Para algunas mamás, este acontecimiento representa un nuevo reto (¡Justo cuando acabábamos de acostumbrarnos a un poco de orden!). Para otras, se trata de un momento de alegría (¡Mi bebé ya empieza a comer!) o que despierta nostalgia (Pero ¿cómo? Si nació ayer…). De cualquier forma, hay que hacerlo. 

Las que les pregunten a sus amigas, cuñadas, tías, madres o suegras, escucharán un montón de consejos y opiniones al respecto. Tantos que incluso pueden correr el riesgo de marearse: ¿Con qué conviene empezar?, ¿cómo combino las comidas con la lactancia?, ¿qué alimentos debería evitar?, ¿empiezo por lo salado o por lo dulce?, ¿le tengo que dar cosas que ni yo como?, ¿cuánto debería comer al principio?, ¿qué pasa si mi bebé no quiere probar?, ¿y si es alérgico a ciertos ingredientes?

Primer paso: Conversar sobre el tema con el pediatra. Comentarle cuáles son nuestros hábitos alimenticios y qué expectativas tenemos respecto de la alimentación de nuestros hijos. Atención, porque algunos conceptos han cambiado desde que nuestras madres empezaron a darnos de comer. Asimismo, hoy hay una enorme conciencia respecto de la calidad o la procedencia de los alimentos. 

Para quienes aún se sientan muy perdidas, la cocina no sea precisamente su fuerte o quieran una guía más bien actual y comprensible, les recomendamos Recetas para mi Benjamín, de Carolina Palacios, que incluye 85 recetas divididas en etapas. Muy fáciles, con modelos de menúes y con el asesoramiento de pediatras especializadas en nutrición infantil. 

Otro material muy interesante son las Guías Alimentarias para la Población Infantil, desarrolladas por el Ministerio de Salud de la Nación (con la versión para padres y cuidadores. Realmente vale la pena leerlo, sobre todo, a partir de la página 15).

Empezar a darle de comer a un bebé significa todo un aprendizaje mutuo. En vez de preocuparnos, podemos verlo como una valiosa oportunidad de crianza. Es un lindísimo momento para mirar a nuestro hijo a los ojos, hablarle, aprender sobre sus tiempos y sus gustos, y enseñarle los nuestros y los de la familia. Algunas madres, incluso, prueban e inventan recetas con inusitado entusiasmo. Eso sí, no hay mujer que no se sienta super contenta cuando su bebé come con ganas o le pide más de lo que preparó con tanto cariño y dedicación.  

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lunes, 22 de septiembre de 2014

Yoga para embarazadas

¿Te recomendaron que practicaras yoga durante el embarazo? ¿Te interesaría probar, pero no sabés bien cómo o dónde? Lee los consejos de una profesional. 



Entrevistamos a Vicky Basualdo, quien practica Ashtanga Yoga hace varios años, enseña este estilo y también da clases de yoga para embarazadas. 

¿Cuáles son los beneficios del yoga durante el embarazo?

Permite trabajar principalmente con la respiración, lo cual es indispensable para cualquier ser humano. La respiración te conecta. En este caso, no solo te conecta con vos misma, sino con el bebé, quien al nacer reconocerá tu respiración;  así, podrás ayudarlo a calmarse a través de esta.

Por otro lado, la respiración te conecta con las partes del cuerpo y eso hace que cada asana (movimiento) ayude a tener un cuerpo más flexible y, sobre todo, más liviano. Esto es muy importante durante el embarazo. La práctica de yoga va ayudando a la mujer a darse cuenta de que ciertas posturas del día a día no ayudan a dar más espacio para el bebé. Por eso, con las asanas buscamos educar al cuerpo para que pueda pararse más derecho y abrirse. Además, le dejamos al bebé más espacio para moverse. Y, como resultado, la mamá respira mejor.

Al trabajar asanas más específicas para ayudar a las mujeres en esta etapa es factible que sientan más apertura en el momento del parto. Es importante destacar que hacer yoga antes y durante el embarazo contribuye con una mejor recuperación posparto. 

¿Qué precauciones hay que tener al respecto?

Principalmente, hay que respetarse. Respetar los dolores, las molestias y los cambios que suceden en cada trimestre. No todas las personas son iguales. No es lo mismo para alguien quien viene practicando yoga hace años que para alguien que recién empieza porque quedó embarazada.

Hay que buscar un maestro o una maestra de yoga que tenga una práctica diaria, alguien con quien la embarazada se sienta cómoda, ya que siempre surgen charlas, preguntas. No hay recetas, cada mujer es distinta y es importante que la persona elegida pueda “leer” el cuerpo, los sentimientos, el momento, que las ayude a moverse, a sentirse livianas, a no cerrarse. 

Por ejemplo, que las ayude a hacer asanas que abran la zona pectoral, ayuden a la movilidad de la cadera, a la postura y a pensar en el posparto, en cómo agarrar el bebé al levantarlo y al acostarlo. También se puede jugar con la creatividad, encontrando formas más relajadas para la hora de cambiarlo. Por ejemplo, hacerlo en el piso con mantas y no dobladas hacia adelante sobre la cama, lo cual le hace mal a la zona lumbar.

¿Cómo elegir un estilo o un lugar de yoga cuando se está embarazada? 

Cuando una mujer tiene una práctica diaria de yoga, sea cual fuera el estilo, uno continúa con su maestra o maestro de yoga y adapta la práctica al nuevo estado. En el caso de empezar yoga embarazadas, es bueno asesorarse. Hay lugares en donde dan clases grupales, profesores que van a domicilio o que tienen grupos muy reducidos. También es bueno probar con alguinen recomendado. Siempre conviene evaluar cómo se sienten y, si no están a gusto, saber que hay otras opciones. Es un momento especial y la mujer tiene que sentirse cómoda. 

¿Alguna recomendación que te parezca importante?

Sí, lo más importante es tener en cuenta que, como mujeres que somos, necesitamos tener el cuerpo y la mente sanas, no solo para el momento del embarazo, sino para el periodo que sigue y para toda la vida. El yoga es la actividad más completa, pero es necesario acompañarla de una alimentación sana. 

Hay que entender que el yoga es un estilo de vida. Algo que uno elige. Por eso, si sienten la necesidad de empezar al quedar embarazadas, ¡adelante! Pero no hay que olvidarse de tener el consentimiento del médico, el cuál no siempre se da en el primer trimestre.  

¿Viste esta publicidad? Según Vicky, los niños pequeños pueden hacer posturas de yoga muy complejas. Ellos están todo el día en el piso, abren el cuerpo, son muy livianos, buscan el espacio y el movimiento, todo, con la mayor naturalidad.



¡Le agradecemos a Vicky Basualdo, de Namastevicky, por participar en este post! Namastevicky es uno de nuestros locales adheridos.

NamastéVicky 
http://www.babycoming.com.ar/locales.php?id=12 

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lunes, 8 de septiembre de 2014

Trabajar en casa con hijos

Muchas mujeres trabajan desde sus casas. El teletrabajo y la modalidad free lance o independiente ofrecen enormes beneficios, sobre todo, cuando se es madre.



Cuando se trabaja desde la casa, por lo general, no hay que pedirle permiso a nadie para arrancar más tarde, ir al pediatra o dar una vuelta con en cochecito si el día es lindo. Además, una organiza sus tiempos para responder a lo que considera prioritario. 

Pero, al mismo tiempo, como no hay un horario de entrada ni de salida, a veces cuesta parar y el trabajo empieza a ganar terreno sobre otras actividades del hogar. También puede suceder que los maridos, por ejemplo, no entiendan que se trata de un trabajo como cualquier otro (Típico: “Mañana, ¿podés ocuparte de…?¿Por qué no? Si vas a estar en casa…”. ). Además, se trabaja en forma muy solitaria, sin compañeros con quienes compartir dudas, descansos o logros.  

“La maternidad es la más importante de todas las profesiones”, dijo Elizabeth Cady Stanton, activista estadounidense promotora de los derechos femeninos. Es cierto. Pero también es cierto que muchas madres aman sus profesiones y necesitan trabajar (más allá de una cuestión económica), y que, además, no quieren estar atadas a las obligaciones o a la dinámica de una oficina. Por suerte, con un poco de ingenio, paciencia, planificación, esfuerzo y apoyo, pasar a la modalidad “desde casa” es posible. 

Para terminar, si estás pensando en trabajar desde tu casa, algunos consejos: 

* Definí tu espacio de trabajo, diferente de otros espacios y tuyo propio. Y, si es posible, que tenga una puerta (para evitar constantes interrupciones).

* Establecé el inicio y el fin de tu jornada laboral, y respetalo. Esto no es tan difícil, porque, por lo general, está supeditado al jardín/colegio de los chicos o al horario de la persona que los cuida. 

* Explicales a los otros miembros de la familia cuáles son tus horarios, tus responsabilidades y tus necesidades, y pediles que los respeten. 

* Sé flexible, pero tratá de mantener cierto orden y continuidad. Así, tus hijos entenderán que hay un momento en el que trabajás y otro en el que estás disponible para ellos (y evitás que sientan que “estás pero no estás” al mismo tiempo). 


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lunes, 11 de agosto de 2014

Tu bebé de primavera-verano


Si vas a tener tu bebé cuando empiece el calor y todavía no sabés bien qué ropita comprarle, lee este post con una lista sugerida y con algunas recomendaciones. 


Linea Upahuama | www.babycoming.com.ar 

Recibir a tu niño junto con el calor es, en muchos sentidos, un verdadero placer. Porque podés sacarlo desde muy chiquito y evitar la sensación de encierro. Porque podés pasearlo en lugares abiertos sin temor a que tome frío o a que esté con mucha gente. Porque algunos aspectos de la lactancia son más llevaderos. Y porque el sol, las flores, el verde nuevo y los días lindos ponen de buen humor a cualquiera. 

Los bebés que nacen en esa época del año tienen algunas necesidades y cuidados diferentes. Por ejemplo, la ropita. Por eso, si tenés fecha para fines de septiembre en adelante, te proponemos el siguiente listado básico para que vayas preparando su ajuar:

Linea Upahuamawww.babycoming.com.ar 


* 5 bodies sin mangas ni piernas.
* 5 bodies con manga larga sin piernas.
* 2 a 3 saquitos de hilo. 
* 1 o 2 gorritos para proteger la cabecita del sol. 
* 6 pares de medias. Los escarpines quizá no sirvan de mucho, porque los bebés son inquietos y movedizos, y se terminan saliendo. 

Algunos consejos prácticos: 

* Elegí prendas para 1 a 3 meses, y no te llenes de cosas para recién nacido porque, por lo general, se usan bastante poco. Es más, algunos bebés son largos o grandes, y casi ni llegan a estrenar ropa de recién nacido.

* Lo más conveniente es tener un ajuar básico y luego ir comprando o cambiando a medida que crece tu bebé. No tenés que tener toda la ropa del primer año antes de que nazca, ¡al contrario!

* Recordá que siempre será más cómoda la ropita que se prenda y se desprenda por debajo, y con cuello amplio.  

* Lavá toda la ropa con jabón suave o especial antes de ponérsela por primera vez a tu bebé.

* ¡No olvides preparar dos o tres equipos para el sanatorio! 

Otros consejos (de yapa): 

* Además de la ropa, ¿qué vas a necesitar de entrada? Trapitos: Entre 10 y 15, grandes, medianos y chicos. Los vas a usar muchísimo. Mantitas: Varias, livianas y de hilo. Podés tener, por las dudas o si te vas a la costa, una opción más abrigada. 

* ¿Qué cosas podés esperar para comprar? Baberos: No todos los bebés los necesitan durante las primeras semanas. Chupetes y mamaderas: Ídem. 

* ¿Qué cosas te conviene elegir bien para un bebé de verano? Un cochecito con una capota bien ancha, para protegerlo del sol. 

* ¿Qué cosas te conviene evaluar con anticipación? Si pensás dar de mamar, quizá puedas ir buscando envases de vidrio chicos para congelar tu leche. Además, ¿necesitarás un ventilador o un aire acondicionado para el cuarto del bebé? ¡No esperes a que hagan 35º C para instalarlo!

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miércoles, 30 de julio de 2014

Un vínculo muy especial

Una de las cosas más lindas de la infancia son, definitivamente, las abuelas y, en muchos casos, las tías.

Para los niños, las abuelas y las tías tienen un modo extremadamente familiar. Su voz, sus ocurrencias y su olor quedan impregnados en  la memoria para siempre. Y sus mimos, gestos de cariño y regalos son tan especiales como los que reciben de sus padres. 

Cuando las abuelas o las tías cuidan a los pequeños, aunque sea por un par de horas, las madres delegan en ellas la función maternal, una enorme responsabilidad. Para los niños, su sola presencia es la prueba más clara de que forman parte de una familia con una historia, una herencia. Y esto es muy importante para su identidad. 

Las abuelas y las tías pueden ofrecer una mirada diferente y enriquecedora sobre los padres: ¿Cómo era mamá cuando era chica?, ¿qué cosas le gustaban a papá?, ¿me parezco a ellos? Esa información siempre interesa y divierte. También serán las únicas que nos mirarán a los ojos para decirnos con total sinceridad cómo estamos o cómo ven a nuestros hijos. 

En momentos en que como madres sentimos que estamos a punto de explotar o de cometer filicidio, ellas pueden desactivar toda la tensión o resolver un berrinche con una mirada o con un solo movimiento (¡son unas genias!). Además, ¿quiénes son las primeras en socorrernos cuando necesitamos una mano extra, llegamos tarde de una reunión o tenemos un programa de adultos? Sí, ellas. Y con enorme generosidad. 

Por eso y por muchos motivos más, fomentar este vínculo es fundamental, y no solo para los chicos. Los nietos resignifican la vida de muchas abuelas y los sobrinos despiertan en las tías sentimientos únicos. 

Les proponemos una actividad para anotarse con nietos y sobrinos: Kindermusik, ¿lo conocen? Vanessa Alanis, teacher en el Instituto Cambridge, asegura que recibe a muchas abuelas: “Se llevan nuevas formas de jugar con tus nietos y se divierten tanto como ellos”. Ella misma conoció el programa como tía: “A mí y a mis sobrinas nos dejó un recuerdo lindísimo y forjó nuestro vínculo”. 

“Mucha gente que vive en la ciudad no tiene una plaza cerca para jugar con los niños. Este un espacio de juego cuidado y accesible, que no se suspende por lluvia y que es muy calentito en invierno. Además, los niños aprenden inglés”, asegura Vanessa. Vale la pena conocerlo, ¿no?

¡Le agradecemos a Vanessa Alanis, de Kindermusik Instituto Cambrigde, por participar en este post! Kindermusik Instituto Cambridge es uno de nuestros locales adheridos.

BENEFICIO EXCLUSIVO BABY COMING: Si te anotas en cualquier taller de Kindermusik, decí que vas de parte de Baby Coming y te llevas un instrumento musical Minimento de regalo. ¡Aprovechá!

martes, 1 de julio de 2014

Ideas para divertirse en casa


Compartimos algunas ocurrencias fáciles para mantener a los chicos entretenidos durante un buen rato y dentro de casa.



Pronto, las vacaciones de invierno. Además de todas las salidas que podés organizar con tus hijos, te proponemos cuatro actividades para realizar puertas adentro:

1. Globos. Inflá globos, soltalos en un ambiente y dejá que los más chiquitos se diviertan. ¡Vas a ver todo lo que intentan hacer con ellos!

2. Congelá juguetes. ¿Eh? Sí. En una taza o bowl chico, congelá una medida de agua. Luego, apoyá un juguetito (una autito o un muñequito de plástico, letras, números, lo que pueda mojarse) y cubrilo con más agua. Dejá que se congele. Justo antes de la hora del baño, mojá con agua caliente el recipiente, como para que se descongelen los bordes, y desmoldá el contenido. Dáselo a tus chicos cuando estén en la bañandera.

3. Pizza. ¿Qué tal si llenás la mesada de tu cocina con recipientes que contengan diferentes ingredientes? Queso en feta o rayado, aceitunas cortadas, rúcula, huevo picado, rebanadas de tomate, tiritas de morrón, pedacitos jamón, etc. Pediles a tus hijos que te ayuden a pintar con salsa de tomate unas prepizzas chicas y dejalos que armen las pizzas como más les gusten. 

4. Una gran hoja para pintar y jugar. Desplegá una tela o sábana vieja en el piso (de las que se usan para cubrir muebles cuando hay que pintar, por ejemplo), dibujá con marcador un camino, edificios, casas, vías de tren, árboles, etc. y ofreceles a los chicos que los pinten con colores. Luego podrán jugar durante horas en ese enorme escenario en el piso.

¿Ideas para compartir con otras mamás?